Historias desde la sombr@ de ...


El Roque NuBlog

jueves, octubre 05, 2006

La Ruta CSI por cortesía de IBERIA

He estado un mes sin publicar nada, pues primero con las vacaciones y luego unos diez dias de viaje por EEUU, entre conferencia en Seattle y visita a New York (la gran manzana).

Bien, también el motivo ha sido por que en la vuelta a España llegué bastante cansado y encima cogí un gripazo made in USA. Dentro de este período, lo mejor de todo fue la apasionante mañana y el viaje del siglo que me hicieron pasar los ineptos e incapaces trabajadores de facturación de Iberia en la menos chapuza terminal 4 de Madrid-Barajas.

Para resumir y no extenderme mucho por que la historia es bastante larga, resulta que llego a la terminal 4 del aeropuerto casi dos horas antes para coger mi vuelo a Madrid a Nueva York y de ahí a Seattle para asistir a una conferencia. Tras preguntar donde ponerme me situo en la fila con menos cola, sin embargo, a medida que avanza la cola, la gente de facturación (sólo había 4, se van marchando). Cuando pido permiso a la gente para pasar por que se me agotaba el tiempo y me tocaba a mí, resulta que el último que quedaba me dice que se va por que se le acaba el turno. Esto eran las 11:55h y el vuelo me sale a las 13h. Tras quejarme y ir para un lado y otro a atención al cliente de Iberia, viene una chica a las 12.07h y me dice que el vuelo está cerrado. ESTUPENDO ¡¡¡

Tras quejas, disputas y demás me mandan a un mostrador donde están las "chaquetas rojas" (menudo nombre para el personal que se encarga de arreglar los follones). Tras volver a insister a esta gente me dicen que no pueden hacer nada, que es imposible que el vuelo está cerrado. Vaya, por que llamo a mi compañero Oliver que iba a ir conmigo en ese vuelo, y ni siquiera había embarcado, pero bueno. Tras dar por pérdido este vuelo me ofrecen otra ruta alternativa: Madrid -> Miami -> Las Vegas -> Seattle (TOMA YA¡¡).

Estuve quejándome y reclamando otra alternativa, pero me dicen que es la única que tienen con sus compañías asociadas o que vuele al siguiente día, lo cual me era imposible por que tenía que hacer una presentación al día siguiente. Bien, no me queda más remedio que aceptar la "excursión" por la estepa americana. La chica empieza a tramitar las gestiones para el cambio de la ruta y la facturación. Parece que no se entera mucho. Empieza a ir a un sitio, vuelve se va a otro, se pone con el ordenador. Yo mientras poniendome nervioso por que el tiempo avanza, y el vuelo a Miami salía a las 15h. Al fín, un chico d iberia me dice que ya puedo ir facturando la maleta mientras su compañera termina los trámites. Me pone la pegatina en la maleta con destino Seattle, pero la deja allí hasta que me dé las tarjetas de embarque. Sin embargo, aún no las tengo todas conmigo. La señorita se vuelve a ir, y cuando vuelve, (OJO, son las 14h pasadas), me dice que el último tramo Las Vegas - Seattle no me lo pueden dar ellos. ¿ CÓMO ? Si, por que usted tenía dos tramos y el último no nos los valida la compañia, no se rollo palante patrás. Pero que me estás contanto, yo he perdido el vuelo por vuestro personal y ustedes tienen que llevarme a mi destino. Nada no hay forma, me dicen que es lo que hay, que llegue a Las Vegas y me compre el pasaje. Definitivametne a esta peña se les va la olla. Pretenden que llegue al aeropuerto de Las Vegas, sin conocerlo y comprarme allí un pasaje sin saber si tengo sitio. Estos lo flipan. Por más que me quejé no había manera.

Me indicaron donde había una oficina de American Airlines por si quería comprar el pasaje, pero fui y estaba cerrada. Esto ya eran las 14.20h. Hasta se me ocurrió la idea de llamar a la Universidad y que miraran in extremis un billete de Las Vegas a Seattle. Sin embargo, los de Iberia me indiban que se me acaba el tiempo para coger el vuelo a Miami, y encima que si quería llevar la maleta que la llevara de troley a ver si pasaba. Pues imáginense, corriendo por todo la terminal T4 con la malea y el portatil a cuestas, pidiendo colarme a la gente en los controles, pillar el trenecito estúpido, seguir corriendo ... hasta llegar al último control antes de la puerta de embarque. Allí, lógicamente perdí la colonia, perfumes, gel, etc.. que pensaba facturar y que por la gracia de Iberia me los quitan. Bueno, tras toda esta movida conseguí llegar a la puerta de embarque y confirmar por teléfono que me sacaran el otro billete a Seattle. Menuda odisea había pasado, para encima todo el palizón de viaje que me esperaba. Esto no se le hace a una persona. En fín, ya he cursado la reclamación correspondiente, a ver que contestan los señores de Iberia que les importa poco el pasajero.



Luego a la vuelta, fui a visitar a unos compañeros en Nueva York, y por tanto, completé el ciclo habiendo recorrido todas las ciudades donde se desarrolla la serie "Crime Scene Investigation", y hacer el viaje de lo que Oliver denominó la Ruta CSI: Miami, Las Vegas y Nueva York.

1 Comments:

  • At 11:06 p. m., Anonymous Anónimo said…

    Querido amigo:
    Aquí estoy en mi casa, comiendome unos bocadillos de queso que debería haberme comido esta mañana mientras esperaba el embarque hacia Washington, pero he te aquí que cometimos el error de llegar junto a tiempo del cambio de turno, y después de decirnos en unos mostradores que nos fueramos porque iban a cerrar y que fueramos tres pasillos más allá, así lo hicimos y mira por donde había una cola de tres pares de narices y sólo un mostrador abierto, preguntamos a un señor de Ibería que no hacía otra cosa que presumir de comunicador si esa era la cola correcta y nos dijo que por supuesto. De repente veo a una señorita muy enfadada hablando con el más chulo de los mostradores, porque poco a poco y pasando los minutos, el personal de Iberia fue llegando, pero la cola en esos momento daba la vuelta no se por donde porque no se veía el final. Como decía una señorita se acercó al mostrador y discutió con el señor, yo no sabía todavía porqué, pero me llamó la atención (por la cola perdió el vuelo a Santo Domingo). Despues de esperar mucho, pero que mucho tiempo nos tocó a nosotros y precisamente, con el mismo señor que había atendido a la señorita anterior. Llegamos todos contentos porque iniciabamos nuestras vacaciones, ponemos nuestros pasaporte encima del mostrador y le decimos al señor que vamos a Washington, y el señor, muy chulo él, nos dice que si mañana, a lo que contestamos, no... hoy, y nos dice, más chulo todavía, el vuelo está cerrado, el siguiente ..., imagina, la cara de gilis que se nos ha quedado, ahora escribiendo esto, hasta me da la risa, solo de pensar en la cara que teníamos, mi marido perdió hasta "la color", como ya sabes, después de peregrinaje de un lado para otro, hemos conseguido que nos cambien el billete para mañana, pero la turne que hemos tenido que hacer por correo electrócnico cambiando los hoteles y el viaje a New York (también vamos) ha sido considerable. En fín, las maletas, por lo menos ya están facturadas, sólo nos hemos quedado con el neceser para poder ir mañana aseados y el bocadillo de queso. Mañana a estas horas deseo estar en Washington. ¡Ah se me olvidaba! el año pasado fui a Berlín y me paso lo mismo, pero como era la primera vez que iba a la T4 pense que la culpa era mía por paleta.

     

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